Ayer estuve charlando con un italiano muy simpático que tiene una pizzería en Barcelona. No quería vender pizzas, quería vender otra cosa, pero esa otra cosa no es importante ahora, ahora quizá mejor hablar de cosas que te interesan si quieres vender sin faltarte al respeto a ti mismo, y sin una venda en los ojos para ver si le das a la piñata o no le das. Él me recordó algo interesante, y me contó dos cosas que me gustaron mucho. – La primera, que a él le gusta llamar al teléfono directamente porque se acaba antes, que él prefiere vender así, tiene más información: voz, tono, ganas… que con el mail y esas cosas no es fácil vender. (y es cierto, fácil no es) – La segunda, es que cuando sus clientes lo marean por el precio los manda directamente a Telepizza. ¿Al 2×1? ¿3×1?… ¿7×1? No sé por dónde van ya, la verdad. (pero dicen las malas lenguas que alguien pidió una mediana 1×1 una vez y su hijo ya no pudo ir a la Universidad) Mira, te cuento algo curioso de ellos: Por lo visto analizan al cliente, lo analizan mucho, se saben su Journey como dicen los marketers, (su viaje hasta que compra, como decimos los que somos de pueblo) Luego, como te conocen tanto, saben lo que te apetece: “¿Cómo se ha despertado Laurita? Hoy fijo que quiere anchoas, que los martes ella es más de salado, además que Saturno se ha alineado con una luna de Venus y es que fijo que quiere anchoas.” Luego le hacen una oferta concreta, sólo para Laurita, exclusiva, por ser Laurita, y luego Laurita les da un input, (más información que acumular) ¿Me afecta que 15 expertos que suman 32 másters se reúnan a vender pizzas con algoritmos para no mortales? No, nada. Pero esto es muy gracioso: Si a mí me apetece una carbonara y voy a pedirla a la web, me encontraré con una foto pixelada y a su lado escrito: “Carbonara Masa fresca, doble de bacon, champiñón, salsa carbonara, topping a base de mozzarella y extra de topping a base de mozzarella.” . Guau. Súper sensorial, Se me cae la baba, o la “drool» que dirá el equipo de marketers. Pero lo que me recordó este chico italiano es esto: Cuando te estés comiendo la primera uva, despediremos el 2020 y a mi Microclass de este mes “Golpe de autoridad convincente …y muy concentrado” que se va para no volver. Ahí, en la 3ª parte te hablo de cómo un restaurante italiano arrasó vendiendo pizzas, sin casi hablar de pizzas. Cómo el dueño, un tipo sin equipo de 15 expertos y sin un solo master, sabía vender infinitamente mejor que Telepizza. (La diferencia da hasta miedo) También te explico cómo puedes aplicarlo a cualquier cosa que hagas y te ahorro ridículas palabras en inglés para tratar de darle más importancia a mi trabajo de la que tiene. Todo lo que vemos dentro, está ahí abajo. Mucho más, aquí PD: Queda día y medio. |
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