¿Tienes un problema de calidad?

Respuesta corta:

Si la gente está contenta y repite, no es tu problema.

Ahora, si esa gente no es tanta gente como debería…

Respuesta larga:




Si esa primera venta te cuesta tanto que tu ángel y tu demonio (uno en cada hombro) se han puesto de acuerdo en que lo mejor es bajarte los pantalones al principio…

Mmmm

Mmm…

Tu guerra no puede ser de calidad.




Esto es 2023:

Si tienes un buen producto, una buena atención al cliente, estás bien informado y eres alguien serio (salvo contadas excepciones) tu guerra no es la calidad.

Esto es 2023.

Tu guerra es otra guerra.





El otro día vi algo en la página de unos clientes (médicos) que no me gustó mucho.

¿Qué?

Regalaban un bonus blablabla.

Ellos lo hacen de forma desinteresada porque de verdad quieren ayudar.

Pero si quieres ayudar, es más interesante ser ultra-interesado.

No ser des-interesado.

Ser ultra-interesado.

Porque si lo gratis no se aprecia aunque tú lo vendas bien, si aún encima el único argumento para echarle un vistazo a algo es que es gratis…

No lo van a valorar.

Es normal, nadie les ha enseñado a hacerlo,

¿Para ti tiene valor ese bonus?

Claro que sí.

Tú sabes lo importante que es, es tu trabajo.

Pero tu cliente no lo sabe.


Y lo que pasa cuando no sabe lo importante que es algo es que:

No le dice mucho…

No tiene ganas de abrirlo..

No tiene ganas de consumirlo…

No tiene ganas de recomendarlo…

La guerra no es la calidad, son las ganas.




Y eso lo sabemos todos los que hemos tenido a alguien en la cabeza mucho tiempo…

y luego un día, por fin, hemos jugado a papás y a mamás con ella o con ello.

No hay color.

Ese día hiciste lo mismo que con los anteriores o con las anterioras.

Pero no era lo mismo.




Yo tengo un servicio y la comunicación no suele ser lo mismo una vez aplicado.

Si fuera lo mismo, las conversiones no mejorarían mucho y me tocaría aplicar la garantía testicular.

Los detalles están en el enlace:

hay algo más aquí