Este email tiene dos partes: En la primera me hago amigo de un sector. En la segunda, (si tienes un negocio) te cuento por qué mucha información de la que te llega desde allí sólo ayudará a tu ego. A tu negocio no. (Y no pasa nada, todos sabemos que muchos dicen que quieren lo segundo pero pagan por lo primero) Entre los que se dedican al diseño hay demasiada gente en contacto con su “niño interior”. Y lo sé porque pasé 12 años allí. Cuando el espíritu de Dios toma posesión del cuerpo de un “creativo”, de golpe se separa de la realidad. Asciende a varios metros sobre el cielo. Y allí, un impulso artístico le dice que su “yo creador”, su “duende”, o su “dragón” (si le van las cosas más fuertes) …pues que le traerá la solución. En arquitectura, esa solución es una casa que le gusta a los que ven revistas de arquitectura, pero no a los que viven ahí. En publicidad, es una campaña votada “la más original” por otros publicistas, sin saber cuánto dinero ha dado en realidad. En diseño web, son elementos que (se supone) dan una buena experiencia de usuario. Decía el otro día un tipo en Linkedin: “¿Necesitas que tu botón tenga integrado el indicador de “cargando”?” Ya sabes, tú haces click y un círculo da vueltas. “Te presento a XXX, una colección de posibilidades para mejorar la experiencia de tus usuarios. Así podrás dar feedback de qué está ocurriendo.” Vale. Yo no digo que no sea importante tranquilizar a un tipo que ha pulsado un botón (que tarda 0,2 segundos de más en cargar) para que no se desespere. Tampoco digo que sea importante. Ahora, lo que es de risa (y muchos todavía no son capaces de ver) es que lo que tranquiliza a un tipo es saber que llega al sitio donde van a solucionarle la papeleta… Un botón, no. Pero eso hoy es complicado. Porque algunos diseñadores (que saben de diseño pero no saben de ventas) le dan una experiencia de usuario tan buena a los visitantes de una web, que dejan hueco para el titular y 25 palabras. Y aquí pueden pasar dos cosas: 1. Que el jefe diga: “Oh, qué bonita se va a quedar mi imagen con esto” y acto seguido ponga el cerebro a remojo. o 2. Que diga: “Sí, vale, esto es bonito, pero ¿dónde cuento lo que me toca contar para que alguien se suba al carro?” 1 o 2. Si tienes algo bueno y sospechas que la gente cuando va con muchas ganas se espera 0,2 segundos a que cargue el botón… pero que como no les toques la fibra se irán aunque tengas la web más bonita de tu bloque, nos vemos abajo: Hay algo más aquí |
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