El otro día hablaba con una chica a la que alguien había pedido referencias de sus servicios… Servicios que tiene descritos en su web. No muy escritos. No muy contados. No muy resaltados. Descritos. (Y descritos para los que ya saben de eso. Yo, que soy traductor de “técnico” a “para tontos” no los entiendo mucho.) El caso. Cuando alguien que quería contratarla le dijo ¿pero tú qué haces? o sea ¿hasta dónde llega tu trabajo? Y claro, con 5 guiones de texto técnico… seguro que la web queda compensada y “limpia” pero claro, esta chica prefería que le contrataran y le pagaran. “Hay que darle una vuelta a los servicios” (“5 vueltas, para ser exactos”–pensé yo) Ella me contaba que su socio no estaba muy seguro de si hacer una inversión o no. “Ana, ¿cuántos clientes nos han llegado por internet?” La respuesta a esa pregunta ya la sabes. Ana no se podía defender. Inapelable. “No es nuestra forma de captar clientes”–me contó. “Yo tampoco ligo nada por Instagram”–pensé yo, al rato de colgar. “¿¿¿???, ?? ¿ ?????”–habría sido la cara de Ana si lo hubiera dicho mientras hablábamos. Menos mal que lo pensé tarde. No quiero que piense que disocio. Porque entonces hubiera tenido que explicarle que no estoy loco, pero que no puedo ligar por Instagram porque mi Instagram no está preparado para ligar. Para eso necesitaría fotos que hablaran del producto. De los gustos del producto. Varios ángulos. Prueba social, quizá. Esas cosas… que no tengo preparadas. ¿Que yo no ligue por Instagram significa que no se pueda ligar allí? En el mundo online hay tantas incoherencias como en el físico, claro. Mucha gente tiene una web aseada dónde se ve su logo guapo y con una plantilla “moderna”… Pero luego claro, viene alguien pidiendo credenciales o pidiendo entender lo que hacen… Y esa web depurada no te ayuda. Ese cliente iba a entretenerse contigo, pero viene otro perfil que sí sabe lo que hace y te come la tostada. Porque sabe que es él el que tiene que entretener a su cliente, y no al revés. Igual eres mejor que él, eso yo no lo puedo saber. Pero no estás siendo mejor que él haciendo entender a tu cliente que estáis hechos el uno para el otro. Yo soy un poco celestino, si te interesa mis servicios están en el link. No tienes que improvisar, ni ponerte nervioso. Lo escribimos y lo dejamos ligar sólo. Suscripción Pablo. |
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