Si lo único que hiciera falta para dar un puñetazo en la mesa y hacer que tu negocio se perciba como algo valioso fueran buenas intenciones… La tasa de fracasos no rondaría el 80%. Pero lo hace. Y no creo que haya que asustarse por eso. Lo que igual no habría que hacer es taparse los oídos y la boca y ponerse a gritar como los niños cuando no quieren escuchar algo: “No-te-escucho-no-te-escucho-no-te…” Te cuento algo que no interesará mucho a negacionistas. Si ya has empezado un proyecto ya te habrás dado cuenta de que la gente no está esperando a que tú lo montes para aplaudirte, valorarte y comprarte. Y si no lo has montado pero vas a hacerlo, te darás cuenta pronto. Esa ilusión, esas buenas intenciones… Son tuyas, sí, pero no llegan a mucha gente más. A tu familia o a tu pareja. Pero ahí se acaba la cosa. Las buenas intenciones con las que cargamos a esas ideas que “si montamos lo petamos” se pueden quedar en nada si no las aterrizamos. Yo no digo que hasta hace muy poco aunque no supieras lo que estabas haciendo internet tenía un lugar para ti. Fue cierto. Pero hoy el precio del suelo ha subido. Y dónde antes vivía un tío con su sueldo de una fábrica, hoy necesitas un sueldo más potente para poder sobrevivir allí. (No sé si me entiendes). Antes podías ser original por el color de tu web. Por tu logo. Por una frase parecida a la del vecino pero no la misma. Por una foto creativa, no sé. Ya no. El juego ya no es atreverse. Atreverse se atreven muchos que se vienen arriba con 3 tutoriales. (mejor que venirse abajo, claro) Te podría decir que no tienes que creerme a mí, que pruebes a hacer todo eso “a ver qué pasa” y cosas así… Pero si fueras colega mío, te diría que pienses en una imagen muy clara cuando trates de hacer que los cerebros de hoy te escuchen: Piensa en estas conversaciones muy animadas con tus amigos en un bar que solo se pausan 5 segundos… y como todos automáticamente estiran la mano para coger el móvil porque necesitan la dosis. Y luego, con eso en la cabeza, te planteas si con atreverse es suficiente. Hay algo más aquí PD: Bienvenido a 2021. Para el resto de cosas es tarde ya, y la realidad no espera a nadie, con buenas intenciones o sin ellas. |
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