Lo que no te van a decir las encuestas de cliente.

Acabo de salir de una reunión con Aitor, un cliente y suscriptor de esta lista.

Aitor y su pareja tienen un curso.

(No doy más detalles porque se les encuentra muy fácil y tampoco hacen falta)

El caso es que estábamos hablando de cosas típicas de sus clientes como:

– Errores.

– Objeciones

– Cosas que les hacen tilín o les hacen tolón.

Lo de siempre, pero.

Ok.

Aitor me contaba que prestaba mucha atención a las objeciones.

Las que se ven, y las que no se ven.

En comentarios, mails, whatsapp… en todos los sitios.

Como un arqueólogo que ve una montañita que tiene pinta de tener un hueso debajo y llega con el pincel hasta la razón de por qué no le han comprado.

Es lo suyo.

Me comentaba que también en las encuestas veía todas estas cosas.

Estoy totalmente de acuerdo con él:

Las encuestas dan información. 

Pero cuando escucho la palabra encuesta aparece un angelito en mi hombro derecho que me dice:

“Es todo mentira”

Y sé que debo escucharle. 

Tres cosas:

1. La gente miente, miente mucho, y miente sin saber que miente.

Eso es así.

Y en una encuesta, por más privada que sea, más todavía.

2. Mucha gente ni siquiera sabe por qué compra.

Te diría que casi nadie lo sabe.

Pero voy a decir mucha gente para que nadie se ponga nervioso con lo de “es que en mi nicho…”

Y te digo más:

3. En la encuesta ellos responderán por boca de quienes a ellos “les gusta” pensar que son.

Es decir:

Responderán como la persona que “creen” que son.

No como la persona que son en realidad.

(Y si no me crees le preguntas a algún amigo terapeuta y te dirá que hay gente que no es capaz ni de pronunciar su verdad en voz alta en una habitación vacía…  ¿te la va a decir a ti?)

Resumiendo:

Se van a mentir ellos y te van a mentir a ti.

Las verdades que hacen que puedas cambiar tu discurso por uno que la gente sí escuche las tiene que desenterrar uno y no es fácil.

​Para eso hay que saber leer los subtítulos.

Por si necesitas ayuda:

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