En estos tiempos donde necesitamos poner en redes la foto de la paella que nos vamos a comer (porque todos sabemos que si no el arroz no sabe igual) no pude evitar ver una cosa dolorosa. ¿En la paella? No, la paella tenía muy buena pinta. En los comentarios. El dolor, lo auténtico, lo real.. casi siempre está en los comentarios. Casi siempre. Maribel comentaba: “Menuda pinta, chicos” y Conchi ponía abajo: “Y que lo digas Maribel, y anda que nos himbitaron” Era miope antes y sigo siéndolo ahora, así que nada ha cambiado. Por aquí las mismas dioptrías. En defensa de Conchi, antes de P y B siempre va M, y no pasa nada. Yo también voy rápido y se me cuelan cosas que me dan miedo, por eso voy a echarle la culpa al diccionario y a lo poco sexy que es leerlo. Buscar palabras misteriosas y encontrarse un: “Dícese de…” “Facultad de…” …y cosas así, pues a ver, igual no dan ganas. Pero hay definiciones fuera de él muy bonitas, muy humanas y muy importantes si quieres transmitir muchas cosas y vender muchas cosas también. Recuerdo una que leí hace mucho porque me pareció especialmente bonita, y es gracioso porque era la definición de la propia palabra “belleza”. O sea no solo era bonita, sino que lo demostraba, (Tan importante es decir las cosas como demostrarlas justo después, pero voy a intentar no pasarme desvelando aunque sea el primer mail de 2021) El caso es que la definición de lo bello era bella, y casi seguro que la conoces, pero por si acaso (de memoria) decía algo así: “La belleza es algo a lo que no falta ni sobra nada.” Sólo hay lugar para lo exacto, lo esencial. No contiene todo, no, todo no. Contiene todo lo que suma HASTA que deja de sumar. ¿Dónde está la línea? Supongo que eso es trabajo del artista. Se lo dirán las musas o los musos, en cada caso. El consejo que nadie me pide es que igual mejor que se lo diga el mundo, su cliente, el contexto o su producto… y luego ya su creatividad. Esa ya después. (Y cuando tienes los datos duerme la siesta contigo) Muchos cuentan muchas cosas en su web, pero ¿son esenciales? A veces lo esencial no está, otras sí está, sólo que lo tapa lo vulgar, lo que sobra, algo precocinado, algo que no suma, sólo desgasta. Algo que no le acerca la belleza de lo que esos profesionales haces a quienes le necesitan, porque con todas esas capas de banalidad ya no pueden ni verle, ni emocionarse con ellos. Mucho más, aquí PD: Lo de arriba es un muy buen filtro. Nada de relleno. |
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