Esto sabe mejor que un croissant francés recién hecho

Te cuento algo curioso.

Es de una cliente argentina que vive en Francia que cerré a principios de año.

Ella que recibió el primer borrador con mis textos ayer.

Podría hablarte de ella, pero a los datos me remito:

– Se la han llevado a más de 30 y pico países a trabajar.

– Acceso a conciertos privados debajo de la oficina de Putin.

– Ha trabajado cara a cara con Obama.

(No “con el equipo de Obama” sino con Obama) 

– La mayoría del IBEX 35 francés son clientes suyos.

– Etc.




Whatsapp hoy a las 8 y 22:

“Hola Pablo

Como estas ?

Estoy viajando pero recién veo tus vídeos y estoy leyendo la propuesta :

ME ENCANTAAAAAA

WoW, que fuerte se siente esto !

Gracias por tu implicación y « finesse » de travail”




Me alegro que sea argentina por lo del “qué fuerte se siente” porque ellos no tienen la tara española de: “es que decir eso es muy aGReSiVo”

Ya, claro.

Espabila Miguelín, que están pasando de tu cara.




29 minutos después:

“J’adore Pablo!!!

Je suis dans avion, mais ne peut pas arrêter de relire les textes

Magnifique travail que tu as fait !!

👏👏👏

¿No puede parar de releer los textos de su página de captación?

Seguro que he debido resaltar lo preocupada que está por la satisfacción de su cliente.

“Chapeau 🎩”

Oh là là Mauriceee….



(Aquí un pequeño matiz psicológico que le sugerí para aumentar el valor de su escuela a ojos de alumnos y clientes)

Tu es un génie !!”

Jajajajaj

Que una persona que ha trabajado con Obama diga que soy un genio es absolutamente ridículo, pero por supuesto las gracias siempre.




44 minutos más tarde: 

“No puedo parar de leerte:

(Fragmento de mi texto) 

J’adore j’adore j’adore 

Bueno, te dejo tranquilo

Un fuerte abrazo Pablo.”





Es curioso porque hace mes y pico otra chica me dijo poco menos que no sabía hacer mi trabajo.

La vida es así.

En todo caso, voy a tratar por todos los medios de cerrar los servicios al público.

Pero aún no estoy ahí.

Así que si tú tienes algo tan fuerte como lo de esta chica, todavía

hay algo más aquí