El otro día estaba en reunión con una cliente y suscriptora de esta lista.
Ella y su equipo tienen varios cursos online.
Yo le dije una cosa.
Ella me contestó otra.
Y si quieres mejorar tus resultados te cuento eso y además te comparto un titular que es la auténtica crema.
Volviendo a la reunión.
Cuando le dije que había que trabajar sus páginas de venta, me dijo algo así:
“¿Para qué?
El curso está descrito dentro:
– Número de videos.
– Las fórmulas que se ven.
– Los instrumentos que hacen falta.
– Materiales.
– Duración.
Todo lo que hay, está dentro.”
Un segundo… ¿seguro que está todo dentro?
Chris Haddad es un copywriter que a mí personalmente me gusta mucho.
A mí, al resto no sé.
Entonces este tío tenía que vender un curso para mujeres que quisieran retener a un hombre y formar una familia.
(Aquí que nos perdone la policía del pensamiento por sentir un deseo tan desempoderante y bajo como este. Algunos somos humanos de segundo rango, lo sabemos.)
No me lío:
El caso es que Chris puso un titular que me explotó la cabeza a mí (y no busco marido) porque supe que ahí había tocado blando.
¿Cuál?
Este:
“Me besó como si yo fuera su hermana…
y ahí supe que me quedaba sola otra vez.”
Luego en su carta de ventas, no contó una historia.
No.
Creó una telenovela
– Cómo John la plantó.
– Cómo su amiga le dijo que pasara.
– Cómo se enteró de que había un especialista en eso.
– Cómo se inventó un podcast para poder hablar con él y le confesó su mentira.
– Cómo él le negó el acceso al curso.
– Cómo la secretaria se lo dio a escondidas…
– Cómo su amiga se lo robó, lo usó, y de golpe su follamigo le invitó a la boda de su hermano…
Y aún no hemos llegado al producto, ojo.
Un culebrón tremendo y aún no hemos presentado nada.
No hemos dicho “lo que hay” en el curso.
Creo (no lo he mirado) que esta carta de ventas tiene unos 10 años y ahí sigue.
10 años.
Para los amantes de los números:
– Tienes una carta que vende a, digamos, 1 de cada 100.
– La escribes bien, y de golpe ¡Pum! 4, 7, 10 de cada 100, los que sean.
– Un día, otro día… otra semana.. otro mes… otro año…
Pues eso.