Me vas a entender enseguida:
Cuando escriben su página de captación o de ventas, muchos se dicen:
“Voy a poner un titular poético, algo que quede bonito, algo evocador”
Otros dicen:
“Voy a hacer una promesa, para que vean que soy diferente”
(Otros sin ningún pudor ni sutileza escriben directamente un “por qué somos diferentes”, que por cierto es algo que jamás le dirían a una tía en una primera cita, pero que en internet como lo hace el de al lado pues será que funciona y ahí voy yo.
Si es tu caso, no pasa nada, que para eso estamos aquí.
Yo lo hubiera hecho igual, te lo digo muy en serio y no para que te sientas mejor.)
Sigamos.
Otros dicen:
“Voy a decirles lo que hago con un poco de clase, que como no los conozco mucho… pues empezar una conversación así muy directo me parece agresivo.”
Vale.
Hacen todas esas cosas.
Tú los visitas, o los miras, y te dices: “meh”
Dicen algo bonito, algún beneficio, se presentan con amplia sonrisa… pero la cosa acaba en bostezo.
“Pero dicen la verdad”
Bueno, no siempre.
Pero en todo caso:
Espabila Miguelín, que la verdad no te importa ni a ti ni a nadie.
Importan otras cosas.
Pero “la verdad” no importa.
¿Tu verdad?
Menos.
Importan otras cosas.
Y esas hay que tenerlas claras muy pronto porque sino desperdicias tráfico, dinero, y posibles clientes…
Me comentaba uno de ellos hace poco:
“Es que ese titular es muy impactante”
Precisamente.
Gracias.
Estoy más feliz que si me dices que los pelirrojos te parecemos sexys.
¿Por qué?
Porque la gente está durmiendo y nadie se muere de ganas por entrar en tu web a ver cómo te presentas.
Nadie,
Nunca,
Ni tus padres,
Nadie en la historia de la humanidad,
Nadie.
Despiértalos, o tira su visita a la basura.
Muévelos tú, o tira su visita a la basura.
Entiende cómo piensan o…
