Cubrir, del lat. cooperīre. 5. tr. Dicho del macho: Aparearse con la hembra. O macho con macho, o hembra con hembra, o mache con hembre. Da igual. Te cuento algo sobre cubrir. Sobre por qué cubrir poco y vender poco es lo mismo. Sobre ese deseo que sólo le parece oscuro a todos esos que aún no venden lo que deberían. Repaso histórico en 20 segundos: Antes del trabajo en las fábricas y de la media hora para el bocadillo, un niño aún pasaba tiempo con su padre. “Niño no hagas eso, haz esto” Trabajo físico. Decisión. Luego el niño crece y escucha los impulsos de su cuerpo: “Cubrir, cubrir, cubrir” Y si sólo se centra en cubrir pues le cuesta, pero con que le suena la flauta una vez sobra. Llega la revolución industrial. Los papás se van a las fábricas, y las mamás (y los coles llenos de maestras) le dicen a los niños que a las niñas hay que tratarlas bien. Por supuesto. Pero aquí está el truco: No definieron qué era “bien”. Y los niños pensaron que si sus impulsos estaban mal y eran unos bestias, pues entonces lo que estaba bien debería ser lo contrario: Esconder los impulsos. Y crecen. Y un día ese impulso es cubrir. “Cubrir es malo. Mejor escondo que quiero cubrir porque las niñas no quieren cubrir. Quieren que sea su amigo. Que las cubra no.” Pasamos de ir desatados a cubrir, a que nos avergüence cubrir. Ay. Entonces la estrategia estrella es esta: Vamos a ser muy amigos. No le voy a decir que la quiero cubrir. (Me lo voy a negar hasta a mí mismo) Y así, un día, ella se inspirará y me dirá: “Oh, qué tonta soy, si tú eres perfecto, mi preferido, ¿me cubres?” Pero eso todos sabemos que no sucede si esa chica tiene opciones. Y mucho menos si estas opciones le dan más seguridad, les hablan más claro, y las entienden mejor. Y menos aún si las hacen sentir atractivas y que si se descuidan las cubren, y las cubren pronto. Y ¡oh! quieren eso. Ganan los dos. Mientras, el otro amigo (el que se esconde) piensa que ellas no quieren cubrir en realidad y que sólo de pensar en eso debería ir a confesarse. Que querer cubrir es una falta de respeto. Y que si ella le deja cubrirla es por hacerle un favor a él. Jajajajajjaa En fin. Muchos no venden porque sólo piden acción cuando su cliente no siente nada. Otros no venden porque “está feo”. Mejor darles cosas y ser mejores amigos. Ok. Pero luego hay otros que saben conectar con quien tienen delante, entienden lo que quieren y les hacen sentir comprendidos. Y resulta que cubrir es una experiencia de la hostia para ambos, tan natural como respirar. Mucho más, aquí PD: Cubre, que es viernes. PD2: No seas un pagafantas de las ventas. |
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