Cuando presenté mi propuesta testicular hace poco, hablé de asimetrías.
Es decir:
Casos en los que puedes perder más de lo que puedes ganar.
O al revés:
Casos donde puedes ganar más de lo que puedes perder.
Lo normal es que estos últimos te parezcan más interesantes.
(Lo normal si no eres un romántico del todo a 100, alguien con un sentimiento de deuda muy grande, o un masoquista. En todo caso tampoco pasa nada, eso es igual de humano.)
Pero no me lío:
Sabiendo que hoy el problema es el exceso de cosas y no la falta, igual es interesante cómo nos aprovechamos del mundo, en lugar de que el mundo se aproveche de nosotros.
Por ejemplo:
– Aprovechar la variedad de comidas a las que tenemos acceso hoy, pero no olvidar las ventajas del ayuno.
– Aprovechar los avances de la medicina, pero relajarse con el azúcar.
– Aprovechar las ventajas de teletrabajar, pero seguir haciendo músculo social.
– Aprovechar whatsapp para comunicar algo rápido, pero sabiendo que a tu madre la tienes que llamar y que chatear no une lo que une un café.
Todas esas cosas.
Tener todas las oportunidades del siglo XXI, con la salud mental del siglo XX.
O al menos intentarlo.
Esto que tú igual lo tienes muy claro o que te parece muy fácil, pues hay mucha gente muy lista que no lo tiene tan claro.
Bueno.
Que te he dado la turra para decirte que si tienes una empresa (y no demasiados complejos) podemos aumentar tus ingresos bastante.
Si tienes algo que ya funcione muy bien, lo podemos poner a funcionar mucho mejor sin ningún riesgo para ti.
Todos para mí.
A mí eso me da lo mismo, la verdad.
Si no quisiera riesgo, sería arquitecto en Suiza.
En el enlace hay una asimetría feliz:
–Si sale bien, muchas ventas para ti.
–Si sale mal, sale gratis.
Muy feliz.
Para más detalles felices, asimétricos y testiculares, aquí: