Si lo que tú pones en el mercado es sofisticado, aquí te cuento un matiz que para mí fue importante descubrir. Para ti igual no lo es, no lo sé. Cuando empezaba en esto y era bastante más parguelas que hoy (pero espero que menos que mañana) tuve un fallo de puntería. No digo desajuste, digo fallo. Es algo que quizá es contraintuitivo, o quizá yo es que me enteraba menos de lo que pensaba. Pueden ser ambas. Lo había vivido con otras cosas y aún así no lo supe ver. Por ejemplo: Imagínate que en 2013 y después de pasarte 6 años sin ver casi la luz del día te dan (como a mí) un diploma que dice: “Arquitecto” Ya sabes como estaba todo en 2013, entonces puede que (como a mí) no te motivara la sensación de que todo el día y a todas horas no se hablaba de otra cosa que de la crisis. Crisis arriba, Crisis abajo, Crisis al centro y crisis para dentro. Vale. Una cosa es ser tonto y otra cosa es que te guste que te hagan sentir una víctima (Aunque no me preguntas te digo que eso sí que es otro nivel de tonto) Entonces como no estaba dispuesto a escuchar día tras día que si la generación perdida, que si no hay dinero… me fui a Suiza. Me dije: “Esta gente tiene tanto dinero que –estando cubiertos– al menos hablarán de otra cosa” Lo dicho: parguelas de manual. Cuando llegué allí, no se hablaba de otra cosa. Le dije a un colega: “Te doy 50 francos si encuentras una conversación en la que en 120 segundos no se haya dicho la palabra: caro, barato, dinero, sueldo, pagar, o franco.” No la encontramos. Te cuento esto porque cuando empecé a ofrecer mis servicios de textos que aumentan las ventas en un negocio, pensaba de verdad que quien me contrataría sería alguien que no sabe de ventas. Que por eso me contrataba. Que siempre serían casos así: gente que sabe mucho de su trabajo pero que no le interesan las ventas. Y me equivoqué. Ahora, tú con esta información haz lo que quieras, pero yo te digo que el sector que saben lo que haces suelen ser muy buenos clientes. Y también te digo que si piensas que vas a llamar su atención con mensajes repetidos, copiados o clichés… Suerte. Hay algo más aquí |
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