“Morir; decidirse a morir; es más fácil para un adolescente que para un adulto. ¿Qué? ¿Acaso la muerte no priva al adolescente de una mayor porción de porvenir? Sí, es cierto, pero para un joven el porvenir es algo lejano, abstracto, irreal, en lo que no acaba de creer.” –”La ignorancia”, Milan Kundera. Quizá no entendamos directamente esta profunda lección de ventas del maestro checo. Perdón, lección humana. Pero sí entendemos muy rápidamente por qué sería complicado venderle un seguro de vida a alguien que no tiene hijos. O una alarma a alguien que vive en un barrio donde no se roba. Sin embargo, no todos los ejemplos son tan de andar por casa. Al final, todo tiene que ver con la distancia: espacial, temporal, emocional… Cada vez lo veo más claro. Todos los problemas del mundo son un problema de distancia. Pero este tema a mí se me queda grande. Estas distancias cambian. A veces se estiran y se acortan. ¿Quién tiene más miedo a morir, una persona con 60 o una con 90? Bueno, el miedo a la muerte no es lineal. Y para prueba, un covid: Al principio pocos casos y mucho miedo, más tarde muchos casos y todo el mundo hasta las narices de llevar tapadas precisamente esas narices. El tema del dolor es un tema fino. En cuanto a ventas, o controlas esto o puede ser tan ridículo como tocar a alguien con un palo donde no le duele. Igual le dolería más a la izquierda, pero ahí dónde tú tocas no. Otro problema de distancia. Quizá tienes suerte y vendes de lejos. Quizá no. No puedo saber qué puntos tocas, ni cómo. Pero sí podemos acortar la distancia con tu cliente, en el link. Suscripción Pablo. |
Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.